El jueves 2 de noviembre, en el auditorio del gremio de los docentes públicos santafesinos (Amsafe) se presentó un sitio web multimedial llamado “Mancha Venenosa”, un enorme reservorio de información sobre la temática de escuelas fumigadas.
Se trata de un trabajo que comenzó hace 4 años y recorrió el interior profundo de las provincias de Santa Fe, Entre Ríos, Córdoba y Buenos Aires recopilando entrevistas audiovisuales a docentes, directorxs, enfermerxs, médicXs, comunicadores, padres y madres junto con documentos que abordan esta y otras a realidades ambientales.
El periodista santafesino Ricardo Serruya, , especializado en problemáticas socioambientales, es uno de sus realizadores y manifestó que “el trabajo partío de de una hipótesis errónea que considera a la escuela como un lugar sagrado para todos, donde la grieta no existe, impoluto donde se respeta a los guardapolvos blancos, sin embargo la realidad es otra, las escuelas rurales no escapan a la (i)lógica de un sistema de producción criminal que, a la hora de fumigar, no distingue ni siquiera las escuelas y las infancias”
Si bien el sitio (manchavenenosa.ar) fue realizado por un grupo de periodistas, realizadores audiovisuales, diagramadores y editores a partir de su presentación se abre al aporte de terceros ya que posee una dinámica de trabajo colectiva, donde quiénes posean o crean tener material afín puede enviarlo para ser sociabiilizado. La idea –dice Marcelo Allende otro de los realizadores- es “usar benévolamente a la escuela para visibilizar la problemática del impacto del modelo de producción agrícola sobre la salud de las personas y el ambiente”.
Al respecto Serruya indicó que “Mancha Venenosa es una web-doc que aborda las consecuencias de la implementación irresponsable de un modelo agrícola que no repara en los daños que puede ocasionar y donde las escuelas rurales, no escapan a la voracidad de un modo de producción transgénico y fumigador que salpica los guardapolvos blancos de docentes y estudiantes. Un juego peligroso que beneficia a pocos. Un veneno que trunca sueños”.
Sus autores también, señalaron que, como el contenido está sujeto a una licencia Creative Commons, todo está disponible para su uso simplemente reconociendo la fuente.
En ese contexto esta web-doc que ya se encuentra funcionando combina elementos del documental tradicional que conviven y se entremezclan con otros formatos tales como videos, entrevistas sonoras, imágenes, documentos, textos y enlaces y permite que cada usuario pueda navegar el sitio como prefiera o de acuerdo a su interés personal. De esta manera quienes entren a manchavenenosa.ar se encontrarán con entrevistas editadas por tópicos pero en un apartado pueden verla de manera completa que, a si vez se complementan con estudios científicos, fotos y hasta dibujos.
UN PRESENTE CONTAMINADOR Y ASESINO
Desde la década del ’90, momento en que el modelo de producción transgénica veneno dependiente fue instalado en nuestro país, la cantidad de productos que se tiran en nuestros territorios ha aumentado considerablemente. Según datos oficiales, en el año 2002 se vertía sobre los campos argentinos 151 millones de litros de veneno. Ese número fue creciendo de manera escandalosa: en el año 2008 ya se tiraban 225 millones, cuatro años después 317 y, se calcula que, en nuestros días se vierten 600 millones de litros de insecticidas y plaguicidas.
El excesivo aumento de la cantidad de agrotóxicos con los que se pulveriza en nuestro país es la causante de contaminaciones en los territorios y en toda la vida (incluso la humana) que reside en estos territorios. Como bien dice Serruya. “este modelo enferma los territorios pero también los cuerpos que habitan estos territorios”
LAS ESCUELAS TAMBIEN SON FUMIGADAS
En uno de los apartados del sitio puede leerse : “ En Argentina hay aproximadamente 15.000 escuelas rurales. Casi todas ellas linderas con campos donde la producción es fumigada. Buena parte de estudiantes, docentes y personal de estos establecimientos denuncian haber tenido contacto con agrotóxicos que se vierten con mochilas, “mosquitos” o son tirados desde aviones”. Esta afirmación es luego avalada por testimonios –muchos de ellos tan necesarios como duros- por maestras y madres de chiquitos que poseen agrotóxicos en sus cuerpos.
Por su parte Allende hace mención a otra información existente en el trabajo donde se denuncia que, según los últimos datos, más de 700 mil niños de la ruralidad viven en peligro. La afirmación es completada por Serruya quién comenta que, entre otros trabajos publicados en el sitio web, se encuentra los realizados en los campamentos sanitarios por la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Rosario, dirigidos por el Dr Damian Verzeñassi, donde denuncia que los y las jóvenes de los pueblos rurales santafesinos tienen entre un 2,5 y un 2,7 más posibilidades de enfermar y morir de cáncer.
En este sentido uno de los apartados de “mancha venenosa” es el titulado “La salud”. Allí además de sendas entrevistas a profesionales reconocidos como el ya mencionado Verzeñassi, Medardo Avila Vazquez o la enfermera del Hospital Garraham “Meche” Mendez entre otros se puede encontrar testimonios de docentes y vecinos que relatan una situación grave y penosa y , con datos certeros, se denuncia el aumento de trastornos de tiroides, diabetes, caridiopatías congénitas, problemas dermatológicos y respiratorios.
Para comprobar esta información resultan vitales los datos –también allí publicados- que surgen del campamento sanitario realizado por Avila vazquez en Monte Maíz Córdoba y los concretados por la cátedra de Salud Socioambiental de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario.
SALIDAS Y PROPUESTAS
Pero no todo es crítica. Uno de los apartados, denominado Las Huertas- recorre experiencias de escuelas donde sus alumnos, acompañados por los docentes, concretan rincones de agricultura sustentable.
“Estos espacios –nos cuenta Serruya- no solo son actividades áulicas que se muestran como una alternativa al modelo agrotecnológico, sino que pueden vislumbrarse como una manifestación de rebeldía”. En una de las páginas del sitio se profundiza esta temática y en ella puede leerse “A lo largo de la historia vemos que a cada movimiento hegemónico se le opone uno alternativo o de resistencia. Al modelo agrotecnológico exportador basado en la siembra directa con semillas genéticamente modificadas se le presentan otras experiencias vinculadas con la agroecología, el comercio justo y la soberanía alimentaria”, y remata “En nuestros días más de cuatro millones de hectáreas son cultivadas de manera saludable, sostenible y sustentable, sin venenos y transformando a la producción orgánica argentina en la segunda más grande del mundo, solo precedida por Australia”.
El realizador audiovisual Marcelo Allende agrega que esta realidad puede verse , no solo en las experiencias concretas realizadas en algunas escuelas, sino también en otras como las concretada por Norma Cáceres en Cañada de Gomez, el consorcio de productores y productoras “La Verdecita” en Santa Fe o la de “Desvío a la Raíz” en Desvío Arijón
Como corolario de este apéndice, quién esté interesado puede adentrarse en la realidad de la soberanía alimentaria con entrevistas a Marcos Filardi , Chavela Zanutigh y Myriam Gorban, entre otros.
Integrantes
El equipo de profesionales responsasbles de manchavenenosa son demás de Ricardo Serruya, y Marcelo Allende, Alejandra Cavaille, Pablo Figueroa, Fabio Galizzi, Martín Rodríguez Jáuregui, Fabio González, Adrián Badaracco, Fabián Pínola, Marcelo Allende, Javier Lanzilloto, Lucas Herrera y Alejandro Molaro.